Las cosas no podían ir mejor para Edwin Frías y Ariana Montes
García. La pareja vivía en la calle Piñango del barrio Lo Amador, y mientras
que el hombre trabajaba como médico, la joven de 26 años laboraba en un banco.
Ariana, oriunda de San Andrés, combinaba su trabajo con sus
estudios universitarios de administración de empresas. También se había
graduado como tecnóloga en gestión comercial.
Desde hace nueve años estaban juntos y vivían con el hijo de
Edwin, un niño de 12 años, fruto de una relación anterior. Pero cuando la vida
parecía sonreírles, la muerte terminó separándolos de un solo tajo.
Ariana murió en medio de un accidente casero: se electrocutó
cuando desconectaba un acondicionador de aire. Edwin contó cómo ocurrió el duro
episodio, pues pese a intentar todo lo que estuvo a su alcance, no pudo salvar
a la mujer que amaba.
“La encontré pegada al enchufe”
Edwin contó que el miércoles en la noche vio televisión con su
mujer mientras estaban en su cuarto. Se quedaron dormidos y poco antes de la una
de la madrugada de ayer, la joven se despertó para apagar el acondicionador de
aire. Entre ella y su marido se turnaban cada noche para hacerlo, pues el
control remoto del artefacto se averió y debían desconectarlo para apagarlo.
Ariana se levantó y fue a desconectar el artefacto, pero
cuando lo hacía recibió una descarga eléctrica que la hizo perder el
conocimiento. Su mano quedó aferrada al cable. Más de una hora después, a las 2
a. m. de ayer, su marido despertó.
“Iba a apagar el televisor porque sentí que estaba encendido,
y la encontré pegada al enchufe, inconsciente. La pared estaba mojada y no sé
si era que estaba electrizada. Corrí a bajar las palancas y enseguida Ariana se
despegó del enchufe y cayó al piso”, relató Edwin en medio de una gran
tristeza.
De inmediato, el médico le dio los primeros auxilios a su
mujer. Había esperanza, pues la vida seguía aferrada a ella: tenía pulso.
Frías levantó a su mujer y la llevó de inmediato a la Clínica
Cartagena del Mar, en el Pie de La Popa.
El médico oraba porque su amada se salvara, pero sus
esperanzas se esfumaron una hora después, cuando los galenos que la trataban
indicaron que había muerto tras las lesiones internas que sufrió al recibir la
descarga eléctrica.
CON INFORMACIÓN DEL UNIVERSAL